Por Carlos de San Juan


Desde hace más de dos meses se venía barajando la cancelación de La Condesa del Show del Mediodía.

Desde que este meridiano tomo nuevos rumbos, esta se veía como más como un sobrante, no como una presentadora.

Todo aquel que ve esta producción entendió que sus días allí estaban contados, debido a que no encajaba con lo que se presenta a diario.

Se improvisan las palabras, pero jamás las ideas decía el maestro de la palabra hablada Yaqui Núñez del Risco, pero la Condesa, ni improvisa, pero mucho menos demuestra algún desarrollo como presentadora.

Solo era en un momento alguien con curvas, pechos fabulosos, que eran del deleite visual de los hombres que la veían como un objeto del deseo.

Le aseguramos que no irá a ninguna parte con sus nuevos proyectos, debido a que tiene carencia intelectual.

Eso de la carta de renuncia no es más que una especie de bobo para los medios.