La carrera de Johnny Depp está basada en personajes peculiares. Ahí están de ejemplo Edward Manos de Tijera, el infame capitán Jack Sparrow y recientemente el vampiro Barnabas Collins de Dark Shadows, que aún no se estrena.

Pero su inspiración para dar vida uno de sus personajes más memorables, Willy Wonka (de la cinta de 2005 Charlie y la fábrica de chocolate) vino de alguien que ocupó la oficina oval de la Casa Blanca.

Durante el programa Ellen del pasado martes, el actor confesó que el loco personaje —de la nueva versión basada en la cinta clásica de 1971— en realidad se creó a la semejanza del expresidente Bush. (En la entrevista, Depp no especificó si se trata de George padre o de su hijo George W.)

"Le añades algunos ingredientes a estos personajes”, dijo Depp durante la transmisión del programa. “Por ejemplo, para Willy Wonka imaginé como sería George Bush increíblemente drogado. Y así nació mi versión de Willy Wonka”.

Depp también dijo que, en general, tener un extraño sentido del humor ayuda a dar vida a los personajes que interpreta.

“Cualquier lugar en donde puedas encontrar un momento de irreverencia o absurdo lo utilizaré ahí mismo”, dijo. “Algunas veces para el espanto del director y definitivamente también del estudio”.