Luego de especulaciones en las que al parecer Rihanna, Coldplay y Katy Perry se debatían la anhelada participación en el medio tiempo del Super Bowl del próximo año, la revista Billboard informó que fue finalmente la California Gurl la que tendrá el honor de musicalizar le show.

La NFL había indicado que la estrella que fuese escogida para el evento, debía realizar un aporte económico a la liga.
¿Por qué?

Porque los ejecutivos consideran que de de alguna manera se debe recompesar la gran exposición que da este espectáculo. En la edición 2014, en la que cantaron Bruno Mars y Red Hot Chili Peppers, unos 111.5 millones de espectadores en todo el mundo sintonizaron.

Sin embargo, Perry descartó, el fin de semana pasado durante unas declaraciones en el ESPN’s College Game Day, la posibilidad de desembolsillar un dólar para cantar en el Super Bowl:
“No soy la clase de chica que pagaría para estar en el Superbowl”. La entendemos, tiene que ahorrar para la costosa celebración que planea hacer para su cumpleaños.
Y al parecer, los organizadores decidieron obviar la idea del pago.