Por: Miguel Ponce
Santiago.-La carencia de equipos en las instituciones de socorro y centros de salud de Santiago se ha convertido en el principal obstáculo para poner en funcionamiento el programa en Santiago y Puerto Plata.

 Aunque el anuncio de las autoridades del ministro de Interior y Policía y de la jefatura de la Policía Nacional establecía que sería en el mes de noviembre, aparentemente tendrá que esperar para el próximo año. Y es que entidades como Cuerpo de Bomberos, Cruz Roja, Defensa Civil y hasta los mismos hospitales carecen de ambulancias hasta para dar los primeros auxilios.

A esto se suma, que el principal hospital, el José María Cabral y Báez cuya primera etapa, del ala norte sería entregada a mediados del pasado mes, aún se encuentra en etapa de reconstrucción. En varias ocasiones, el jefe del cuerpo de bomberos de Santiago, el coronel Ricardo Rosario ha advertido de las dificultades que enfrenta ese organismo en materia de equipamiento.


 La estación central apenas tienen seis camiones y algunos datan desde el año 70.
 Rosario entiende que para brindar un servicio adecuado requieren de al menos 15 camiones que en caso de ocurrir un siniestro.

 En el caso de la Defensa Civil, recientemente fue reparada la única ambulancia con que cuenta y que llevaba varios años arrumbada. En total son tres los vehículos de servicios que fueron puestos a funcionar, pero todos en mal estado.

 Francisco Arias, director del organismo de socorro dijo que las reparaciones se hicieron gracias a la intervención de la gobernadora provincial, Aura Toribio y Fernando Rosa presidente de FONPER. El pasado viernes durante la graduación de 217 rasos que junto a otros 300 agentes pasarán a formar parte del programa preventivo, el general Orison Olivence Minaya reconoció que hasta tanto no estén listos instituciones de salud y los bomberos no se puede hablar del 911.

En Puerto Plata, representantes de organizaciones comunitarias y legisladores aseguran que las dificultades que enfrentan por carencia de centros de salud, impedirá que pueda materializarse ese programa que permitiría disminuir los hechos de violencia. Ponen como ejemplo de Sosúa, que lleva años reclamando la construcción de un hospital.