Rodeada de toda su familia, junto a sus hermanas, esposo y famosos como Emilio, Gloria y Lili Estefan, Thalía le dio el último adios a su madre, Yolanda Miranda, en New York, ciudad donde ambas viven desde hace 10 años cuando la cantante se casó con Tommy Motola. Lejos de la supuesta polémica entre hermanas por el destino final de los restos de Doña Yolanda, que si en México o Estados Unidos o si la reconciliación con Laura Zapata no había durado ni 24 horas porque esta última terminó peleada con Thalía por no firmar permiso para extraditar el cadáver. El cadáver de la señora Miranda arribó en la mañana del martes a New York en donde ya la estaban esperando la cantante, sus hermanas Ernestina, Federica y Gabriela y finalmente Laura Zapata acompañada de su pareja. Los homenajes hacia la madre de Thalía comenzaron en la tarde temprana con una reunión en la casa que la cantante comparte con su esposo y su hijita Sabrina y en donde también vivía su mamá. Un grupo selecto entre los que se encontraban los Estefan apoyaron a la cantante y recordaron momentos importantes compartidos con Yolanda. Ya por la tradecita, en un lugar que solo los invitados tenían información de cómo llegar, se le ofició una pequeña ceremonia Cristiana a los restos de doña Miranda en presencia de sus amigos y familiares, para finalmente darle santa sepultura en un cementerio privado de la ciudad, uno de los más caros y selectos de la capital del mundo en donde se encuentran enterrados estrellas como John Lennon, Nelson Rockefeller, Christopher Reeve, entre otros. A la nochecita y luego de una jornada larga Thalía pidió despedirse de su madre en privado y se habría mantenido unos cuantos minutos frente a la última morada de su madre hablándole. En todo momento, dentro del séquito de seguridad que acompañaba a la cantante estaba un médico y un paramédico, ya que le queda tan solo una semana antes de que nazca su segundo hijo, que según lo que se comentaba allí es otra niña. Se dice que el jueves, antes que cada hermana vuelva a su destino y a comenzar poco a poco a retomar su rutina diaria, todas se volverán a reunir en la mansión de Thalía para juntas empacar algunas de las cosas de doña Yolanda que quedaron en su cuarto dentro de la casa de la cantante. La preocupación de todos los amigos presentes y el mismo Motola que no se separó ni un segundo de al lado de su esposa, es ver cuál será la reacción de Thalía ahora cuando la realidad le muestre que en verdad su mami ya no está a su lado, por lo menos físicamente.