Sao Paulo. - El cansancio se empieza a sentir entre algunas de las 89 candidatas del certamen de Miss Universe, a medida que se acerca el día de la noche final, la cual se celebrará mañana, lunes, en el Credicard Hall de la ciudad brasileña.



Las jóvenes pasan largas horas en los ensayos del concurso, repitiendo una y otra vez la coreografía de apertura y el desfile por la pasarela.

A las 8:30 de la mañana, las jóvenes ya están desayunando y regresan al hotel donde se hospedan pasadas las 8:00 de la noche.

Algunos de los padres de las candidatas, como los de la delegada de Netherlands (Kelly Weekers), se han mostrado preocupados porque entienden que el trabajo y la presión que le ponen a las jóvenes es excesiva.

“Entiendo que es un negocio, pero ellas son humanos”, comentó anoche el padre de la joven de Netherlands, mientras aguardaba ansioso en el hotel para ver a su hija aunque fuera por unos minutos.

Anoche, durante uno de los ensayos, se observaron a algunas jóvenes un poco desanimadas y cansadas. Muchas no llevaban ni una gota de maquillaje, lucían pantalones de sudadera y zapatillas deportivas y trataban de descansar brevemente entre los llamados. La estética también les importó poco a algunas de las concursantes, como lo fue para la representante de India, Vasuki Sunkavalli, quien no dudó en ensayar su pasarela en pantuflas.