La boda de Julio José iglesias y la modelo belga Charisse Verhaert fue el pasado sábado 3 de noviembre en El Rincón, la finca del marqués de Griñón que estuvo cerrada a cal y canto para impedir cualquier filtración. Sin embargo, sí pudimos ver llegar en sus coches a los padres del novio, por un lado Julio Iglesias, sin su mujer Miranda Rijnsburguer y sin sus 5 hijos pequeños, por otro, Isabel Preysler acompañada de su marido, Miguel Boyer. Tampoco estuvo Christian Aldaba, el marido de Chábeli, ni sus dos hijos. Y Carlos Falcó, segundo marido de Isabel Preysler tampoco acompañó a los novios.

Esta sonada ausencia, sumada al plantón de Enrique Iglesias, ya ha disparado las alarmas sobre una posible pelea entre la bella Miranda, que permaneció en Miami, y los hijos mayores de Iglesias. Esa relación enquistada es bien conocida por Toncho Nava, mano derecha del cantante durante 30 años “Detrás de cada hombre tiene que haber una gran mujer y en el caso de Julio no es así. Y la de Julio no colabora lo que tendría que colaborar en la relación de éste con sus hijos mayores”.

El cantante no accedió por la puerta principal de la finca para evitar que las cámaras captaran su llegada. Julio Iglesias, que viajó a España en su avión privado, aprovechó la ocasión para dar un concierto en Sevilla unos días antes y revisar los desperfectos que un incendió causó en su finca de Marbella. El mismo día del enlace de Julio José, el cantante aterrizó en el aeropuerto de Torrejón de Ardoz, se vistió de gala en la habitación de su jet privado y se trasladó hasta el lugar de la ceremonia en un coche de lujo.

Una boda íntima (sólo 63 personas) y con la gente más cercana. El aperitivo ligerito con jamón, cucharitas variadas y algunas brochetas y un banquete comedido. Luego los invitados degustaron langostinos en marinados acompañados de diferentes hojas verdes y una merluza a la plancha con guarnición, todo preparado por el restaurador José Luis. Charisse Verhaert, cuyo vestido ha sido diseñado por Manuel Mota, llegó a eso de las 15:30 horas en un Mercedes Blanco a la finca del Marqués de Griñón en Aldea del Fresno. Julio José Iglesias lo hizo 40 minutos más tarde dentro de un todoterrero verde.