Se entrego el que faltaba, de los implicados de la muerte de Suleika Ponciano Solano
sábado, julio 06, 2013
POR Argénida Romero
El vocero de la
Policía Nacional, coronel Jacobo Mateo Moquete, informó en rueda de
prensa que el prófugo de 24 años -quien habría participado en el crimen
junto a Arturo Santiago Alcántara Nepomuceno (Monalisa)- se entregó a
través de "una autoridad de la provincia Monte Plata".
La
identidad de la persona que entregó al prófugo no fue ofrecida para
asegurar su integridad, indicó el vocero de la Policía Nacional.
Agregó
que también fue recuperada el arma con que fue herida la oficial, así
como la de reglamento de la segundo teniente, que fue entregada por el
acusado prófugo.
El vocero policial explicó que el arma homicida
es una pistola Smith & Wesson, calibre 9 milímetros, número VKM5118,
la cual fue "sometida al proceso de identificación balística coincide
con el proyectil extraído del cuerpo de la malograda oficial".
El
arma homicida habría sido comprada por RD$7 mil a los acusados, luego
de cometer el crimen, por Rafael Contreras de la Rosa, quien se
encuentra detenido por el caso.
El coronel Mateo Moquete apuntó
que esta pistola fue robada por los acusados de asesinar a la oficial a
una persona que no quiso identificar, asegurando que ésta la portaba de
manera legal.
Santana Perdomo (Willy), de cuyo historial
delictivo no se ofrecieron detalles, fue identificado como "el autor
principal" del crimen.
Sobre el otro implicado, Arturo Santiago
Alcántara Nepomuceno (Monalisa), se informó el jueves que fue apresado
el día 2 de octubre del 2011 con porciones de cocaína y crack y puesto
en libertad el día 6 del mes de junio del 2012, mediante una garantía
económica que le impuso un tribunal colegiado de Santo Domingo Este.
La
segundo teniente Ponciano Solano, de 23 años, quien formaba parte de la
escolta de seguridad de una de las hijas del presidente Danilo Medina,
fue herida de muerte el miércoles en la mañana en el barrio El
Tamarindo, municipio Santo Domingo Este, cuando se dirigía de su casa a
la residencia del mandatario, desde donde todas las mañanas acompañaba a
Ana Paula Medina a la Universidad Iberoamericana (Unibe), donde estudia
medicina.
La occisa era nativa de Hato Mayor, egresó de la
Academia Batalla de las Carrera con honores y estaba adscrita al
Departamento Nacional de Investigaciones (DNI).
Sus restos fueron
sepultados el jueves en su pueblo natal, en medio de expresiones de
dolor y reclamos de justicia por su asesinato.
Dardos a la justicia
Ante
el asesinato de la joven oficial, el presidente Medina consideró el
jueves que la Justicia debía ser más enérgica contra los delincuentes,
porque uno de los asesinos de la joven tenía 15 días que había salido de
la cárcel.
Ese mismo día, el presidente del Senado, Reinaldo
Pared Pérez, señaló que la justicia dominicana debe actuar con más
dureza al momento de dejar en libertad a personas que deberían
permanecer en la cárcel.
"Yo soy partidario de mano dura
aplicando la ley, porque la delincuencia no puede ganarle la batalla a
la sociedad dominicana", indicó Pared Pérez, al lamentar el asesinato de
la segundo teniente Suleika Ponciano Solano.
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