En un impase en su gira Euphoria, con Enrique Iglesias, la cantante Jennifer Lopez aprovechó su estadía en Miami para pasar unos días con sus hijos y su novio.

Con un sensual bikini amarillo, JLO disfrutó de ver a Max y Emme jugar con el bailarín Casper Smart, con quien hicieron todo tipo de piruetas en el aire.

Pero el calor la obligó a darse un baño en la piscina y para ello, la cantante corrió hasta el borde y saltó cual “tiro de bomba” al agua.

No hay dudas que sus curvas siguen intactas y que gracias ellas, se coronó como una de las mujeres más sexys del mundo.

Siempre cuidada, con una toalla o algún pareo, JLO no se sacó sus anteojos y continuó disfrutando de la tarde desde su reposera.