Rihanna parece estar disfrutando plenamente sus días de crucero por la costa italiana. Tras una juerga de varias horas, que incluyó mucho alcohol y hasta un improvisado buceo, terminó besando a una de las amigas con las que comparte este viaje.
La cantante está visitando Italia a bordo del yate Latitude, y frente a la ciudad de Sardinia, en la bahía de San Fruttuoso, decidió entrar al mar para ver la estatua de el Cristo del Abismo, sumergida tras un hundimiento en 1954.
Luego, Rihanna volvió al crucero, donde estuvo de fiesta hasta tempranas horas de la madrugada. De hecho, ella misma contó sus aventuras, a través de varias fotografías que publicó en su cuenta de Twitter.